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¿Cómo sería ser inmortal? Sería estar siempre viva.
¿Y estar siempre consciente conociéndose inmortal?
Me imagino acabándose las razas y las especies y que yo aún vivo, que el sol quema la Tierra donde vivo, que no queda nada mientras yo vivo, que el sol se apaga al fin y yo, sin embargo, vivo.
Y sentir la carne quemada por el fuego, una eternidad de todo el hambre y la única sed, y ¡no tener aire para respirar! ¿cómo sería la angustia feroz de la asfixia sabiendo que es para siempre? ¿y la de seguir viva después de la última estrella, del último agujero negro, de la nada?
En este punto es que me imagino, entonces, que tener consciencia de la inmortalidad es permanecer en la muerte para siempre.
Ah, que lindo experimento mental, ni acabo de reconciliarme con la idea de la muerte que ya me está doliendo en la carne la traición del conocimiento.
¿Y cómo es estar vivo conociéndose mortal?
Por ejemplo, el de nuestra señora B*, que está a punto de retirarse por la jubilación pero que hace más de un mes que falta porque está enferma. Todos los estudios venían siendo ineficaces para encontrar la causa, hasta que dos días antes de navidad nos trajo los resultados del último. Uno de nosotros abrió los sellos del sobre y los que ahí somos médicos enseguida entendimos, antes de que a ella pudiera decírselo nadie más autorizado, nosotros supimos.
Si es que alguien va a saber cuándo empezó su proceso de morir, será siempre porque los médicos lo sabremos antes.
Me dijeron que la señora B* -y nadie sabe cuánto sabe ella-, piensa hacer y permitir que le hagan todo lo que sea necesario para seguir viviendo, que siente apenas alterados los planes que tenía para su retiro.
¿Cuál es el truco de la vida consciente de su mortalidad? ¿La conciencia o el conocimiento?
La negación de la consciencia y la falta de conocimiento, podría decir yo, si no fuera porque siempre pienso que nadie puede asegurarme la certeza que tengo de que realmente moriré.
Y porque siempre siento, siento que hay tiempo.
– cogito -´
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ad hoc 
por alguna razón, la gente discute esta entrada aquí
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Muy bueno, aunque lo llamaría ‘pensamiento realista’ más que cruel. Es duro, y es real.
Definitivamente no quiero vivir por siempre, principalmente porque creo que la vida se tornaría aburrida y muy dramática (ver a todos los amados morir, una y otra vez, por siempre).
Con respecto al ejemplo de la Sra. B*, yo creo que preferiría morir sin andarme con tantas vueltas. Si tengo que elegir morir en ‘los tiempos predeterminados’ o hacer una dieta especial de medicamentos que me van a hacer sentir peor y/o mermarme por otros lados para extender un mes de vida, elijo lo primero. Pero bueno, hasta que no se experimenta en carne propia, no creo que haya mucho que podamos teorizar.
Saludos y suerte
PLPLE
hola camaleonx
la mayoría de las personas no quiere morir, pero no puede decir hasta cuándo quisiera vivir
la muerte como experiencia tiene un defecto, pasás por el proceso y el momento culminante es el final, y se terminó
no tenés oportunidad para reflexionar sobre la vivencia de morir
así considerada es como nacer, no queda en la memoria de nadie
En lo de experimentar, me refería al saber (con fecha cercana) la muerte, no a la muerte en sí. O sea, al proceso por el que atravesamos una vez conocida la noticia.
No soy religioso, por lo que pienso lo mismo que vos sobre el final de la vida.
Saludos
PLPLE
yo hablaba del proceso de morir desde que inicia la enfermedad terminal, pero había entendido tu punto
y respecto a lo que vos decías, yo quisiera saber la fecha probable en la cual moriré, prefiero pasar por un proceso de muerte que se pueda prever y que me de tiempo para despedirme y no morir instantáneamente en un accidente, por ejemplo
al menos por ahora, creo que prefiero pasar por una agonía de enfermedad que por el «pobrecita, por suerte no sintió nada»
no me gusta dejar cosas sin terminar
Siempre pensé que debe ser distinto ser eterno que ser inmortal. La palabra «inmortal» tiene una negación: el no poder morir. Lo eterno es así, ya está en su naturaleza. El inmortal probablemente desee morir. Aunque el condenado por una enfermedad probablemente no piense de ese modo, lógicamente. La idea de la inmortalidad debe ser tentadora para la señora B.
Un beso.
hola Emme, muy bien dicho
para sorpresa de todos nosotros, la Sra. B* está mejorando después de las dos cirugías que se hizo en enero
la moraleja sería, supongo, que si no se quiere morir vale la pena tratar de no morir
Sobre tu primera reflexión en el comienzo de la entrada Cormac McCarthy en su libro La carretera nos muestra con crudeza todo lo que imaginas.
Por otra parte, un apunte, he sentido las ganas de morir en dos personas que amaron profundamente estar vivos cuando desde una agonía muy dolorosa han visto irse poco a poco su razón y su conciencia de y sobre estar vivos. Su enfermedad, les quitó todo, no sólo la vida.
Y la frase «no me gusta dejar cosas sin terminar» siempre me pareció que alberga un principio valiente y sincero, pero fuera de la enfermedad definida “terminal”.
si max,
por eso yo prefiero una enfermedad terminal, con todo lo que ello implica, antes que un accidente
por otra parte, vivir hasta oportunidad de tener ganas de morir, no sólo me daría tiempo de completar las cosas y no dejarlas sin terminar, sino que sentiría que hasta terminé completamente la vida que valía la pena vivir,
que es mejor que irse nomás
ahora busco La Carretera
y vuelvan pronto, porque en breve este blog estará ingresando a su cuarta sección
la experimental
mañana tenemos aquí la prueba piloto
ohhh ahhhh
Emmm..Buenassss!
YO todavia voy por la mitad de la segunda seccion, pero igual como que queria saber de que se trataba la cuarta seccion eh?
Un beso
A mi me gustaria__Seria así como? El Cazador…
Y que..?? sh.
«mañana tenemos aquí la prueba piloto
ohhh ahhhh
cogito (bis) – 31 Marzo 2010 a 12:59 »
(No quiero meter presión pero tamos esperando, eh!)
y qué día era «mañana» a verrrr
¿el primero de abril tal vez? ¿el día de tontos capaz?
ooooh
la cuarta sección mmmm ehrrr sería como la parte donde yo pesco algo de ustedes
Y queres pescar algo como que?
Yo, en este momento, podria ofrecerte un estado cuasigripal…pero no creo que eso sea lo que queres pescar, no?
😉
Beso
Oh!
OHH!
»Día de los tontos»… otra vez para mi!.
Saludos
Intente pescar, no será dificil.
suelo pescar con redes
como las arañas
estoy tratando de volver
ojalá entretanto no se vayan
los montañeros somos muy pacientes, allá y acá
bueno, por empezar y hasta el 31 de mayo que es la fecha del fin de esta tercera sección, o sea para terminar, tengo ganas de subir el guión de película de freaks que imaginé para que dirija spike jonze interpretando a max
jajaja lo que tiene que hacer el muchachito de Maryland es arreglarse un poco el careto, mira que retratito tiene en imdb http://www.imdb.com/name/nm0005069/
venga ese guión…
ok, después del sábado
pero a mí me parece muy atractivo el tal spike
vale
y vale
te dejo, estoy cansado
ciao, baci
que descanses
besos max
Hola, solo me pase a saludar por aca ya que vi algo de accion…
Y como nos estas poniendo deadlines (solo para compartir las tuyas, supongo…) te digo que no vuelvas hasta que no termines algunas cosas fundamentales del «mundo exterior», que aca estaremos esperandote, cual reina en coronacion triunfante!!!
Beso
yeeee
qué bueno!
gracias Cachorra
Bueno mi estimada Majestad…A la espera de su regreso triunfante (pero no corra, dediquese a lo q debe!)
he de declarar q la he leido toda en su totalidad.
y solo eso.
Beso
Algún beso.
Otro beso.
Fdo: El Paciente Job
Y yo tb paso a dejarte un beso y fuerza para el tiron q falte!
¿Para qué la inmortalidad? Todos la queremos pero solo para nosotros, no creo que cuando se habla de ello se tenga en cuenta. Inmortalidad restringida parecemos pedir.
De existir la inmortalidad el planeta se habría practicado la eutanasia, por overbooking.
La muerte no existe. La inmortalidad se encuentra con la eternidad el día en que nace el inmortal, la eternidad no nace. Así como uno se encuentra de golpe con vida, probablemente pueda uno no encontrarse nunca sin su vida. El regalo de vivir se manifiesta de muchas formas, la más exquisita es la forma humana, también la más sufrible por el conocimiento incluido en el vivir.
La muerte es la fecha de caducidad del ansia de conocimiento humano.
Puedes acabarte el yougourt antes de la fecha -véase creencias restrictivas-, pero más allá de ´la fecha´ no habrá yougourt que comer, está estipulado así, una vez pasado esa fecha ya no hay lo que «se conoce» como comestible. Es otra cosa.
¿El cielo de los yougourt? ¿San pedro Bifidus con piña?
Yo elegiría vivir un poco más con ese poder de inmortalidad, que se te derrite la piel y sigues vivo con plenas capacidad motoras, auditivas y adicciones, manteniendo a la vez una proporción áurea semejante o mejor que la de un donut, «un OVNI» que dirían los habitantes de esos planetas que visitase en mi inmortalidad vestida. Conociendo, más y más.
Tal vez un día, creemos del plástico a nuestra imagen y semejanza el recipiente de una esponja de conocimiento, y entonces ya los humanos no hagamos falta como mecenas y artistas. Podremos dedicarnos a la destrucción, que a finde cuentas es lo que mejor se nos da, a pesar de que el Orientador Escolar que es Yahvé (yavestrú) ha opinado erróneamente una y otra vez que debemos hacer.
Hacer o no hacer. La inmortalidad se alcanza en ese chispazo de decisión. Eso si es posible.
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Es probable que exista una tercera postura, sin saberlo es la de la Sra. B* y entre fragmentos del texto pienso que también la tuya.
Esta postura sería la alternativa a mortal e inmortal: más inmortal que el resto. Esto no sería vivir más allá del fin del Universo, sino más allá de lo físicamente humano aunque no más allá de la perspectiva humana. Estirar la vida hasta allá… ¿dónde queda allá? ¿cuándo se corta? Cuando uno deja de imaginarlo.
Sobreviviríamos a nuestros hijos, nietos y varias generaciones más, hasta que nuestro apellido, nuestra casa, nuestro país, y nuestra estructura social se acaben. No habrá entonces documento de la época en que nacimos, no somos identificados con nada conocido, habremos perdido todo margen de identidad y la nueva realidad no nos integraría a ninguno de sus casilleros.
Cuando vivir sin nadie que nos conozca o morir sin nadie que lo lamente es lo mismo… es lo mismo ser mortal o inmortal.
A algunos les sucede de jóvenes.
D.
http://bit.ly/AntidotosContraLaMuerte
Queremos actualización!.
gracias por los comentarios, y perdonen que los haya visto recién hoy
es que recién hoy